CROQUETAS DE SECRETO IBÉRICO CON UN TOQUE DE QUESO AZUL Y MIEL

 Croquetas de secreto ibérico con queso azul y miel, he hecho pocas pero están riquísimas (han salido 24 croquetas, 14 más grandes y 10 de tamaño más pequeño), las he servido con tostadas de champiñones, queso de cabra al pimentón, soja edamame con sal Ámbares del Eoceno y aceitunas 

 Ingredientes:

100 g. de secreto ibérico asado muy picadito.

1 cebolla pequeña muy picadita.

3 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra.

3 cucharadas soperas de harina de espelta ecológica (50 gramos), tamizada.

Unos 350 ml. de leche de vaca semidesnatada.

Nuez moscada recién rallada.

 20 g. de queso azul desmenuzado.

Una cucharadita -de las de café- de miel.

Sal.

Para rebozar:

Harina de espelta.

Huevo batido.

Pan rallado.

Aceite de oliva para freír.

Preparación:

Echamos el aceite de oliva en una sartén, cuando esté caliente añadimos la cebolla picada y

pochamos hasta que esté bien hecha -cuidando que no se queme-, añadimos la carne picadita y rehogamos 2 - 3 minutos, incorporamos la harina y removemos a fuego lento durante unos 10 minutos.

Pasado este tiempo, añadimos poco a poco la leche, añadimos sal y nuez moscada a nuestro gusto, removemos con cuchara de madera para que no se formen grumos y dejamos cocer a fuego lento unos 10 - 12 minutos, removiendo de vez en cuando para que no se pegue a la sartén, incorporamos el queso azul y removemos para que se integre en la masa, retiramos la sartén del fuego, añadimos la cucharadita de miel, removemos para que se integre con el resto de ingredientes, vertemos la masa en un recipiente y dejamos enfriar. Una vez fría, tapamos y guardamos unas horas en el frigorífico para que endurezca.

Hacemos las croquetas: preparamos harina, huevo batido y pan rallado en tres cuencos individuales, con la ayuda de dos cucharas grandes cogemos un poco de masa, damos forma redondeada y pasamos por harina, huevo y pan rallado hasta terminar toda la masa y tener todas las croquetas hechas.

Ponemos aceite de oliva en un cazo pequeño, cuando esté bien caliente freímos las croquetas en tandas pequeñas hasta que tengan un ligero color dorado, una vez fritas vamos colocándolas en una fuente con papel absorbente para quitar el exceso de aceite. Servimos.