Ingredientes (para 4 personas):
1 kilo de patatas, peladas y lavadas.
1 huevo.
1 cucharadita -de las de té- de sal.
1/2 cucharadita -de las de té- de pimienta negra recién molida.
50 g. de mantequilla en trocitos.
Mantequilla para engrasar el molde.
Para acompañar:
Aros fritos de cebolla.
Preparación:
Calentamos el horno a 200º C, calor arriba y abajo.
Rallamos las patatas en un cuenco y escurrimos, quitando todo el líquido, añadimos el huevo, la sal y la pimienta negra y removemos.
Engrasamos generosamente con mantequilla un molde de tartaleta de 20 cm. o una tartera llana de metal.
Vertemos la mezcla de patatas en el molde y ponemos unas puntas de mantequilla en la superficie.
Horneamos las patatas durante unos 30 minutos o hasta que la superficie esté dorada.
Sacamos el pastel un momento del horno y desmoldamos en una fuente de metal engrasada o en la placa del horno, volvemos a hornear el pastel, hasta que se tueste por todos lados, unos 30 minutos.
Retiramos el pastel del horno, adornamos con aros de cebolla frita y servimos enseguida.
Notas:
También podemos añadir una cebolla pequeña rallada a las patatas ralladas.
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