He preparado una ensalada fresca, crujiente y con un toque ácido gracias al kéfir y el zumo de limón, vamos a aliñar la ensalada justo antes de servir porque así evitamos que la verdura se ablande
Ingredientes (para 2 personas):
Un puñado de canónigos.
1/2 pepino mediano, pelado y cortado en tiras finas de unos 6 cm.
3 cebolletas finas, cortadas en trozos de unos 4 cm al biés.
1 tomate mediano, pelado, sin semillas y cortado en 8 gajos.
2 pimientos pequeños dulces, uno amarillo y otro naranja, cortados en tiras finas.
1 - 2 tallos de apio, sin hebras y cortados en tiras finas de unos 5 - 6 cm.
4 rabanitos rojos, sin pelar y cortados a lo largo en cuatro trozos.
4 rábanos blancos, sin pelar y cortados a lo largo en cuatro trozos.
Brotes tiernos de rábano, brócoli y mostaza.
Para el aliño:
Unos 100 ml. de kéfir.
1 diente de ajo, pelado y machacado en el mortero.
2 cucharadas soperas de zumo de limón.
2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra.
Sal y pimienta negra recién molida.
Menta fresca, muy picadita.
Para decorar:
Menta fresca picadita.
Preparación:
Colocamos toda la verdura de la ensalada en un cuenco grande.
Echamos en un cuenco pequeño los ingredientes del aliño y mezclamos enérgicamente con un tenedor hasta que emulsione e incorporamos a la ensalada cucharada a cucharada, mezclamos, decoramos con menta picadita y servimos.
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